Suma-t con Entre Libros

Este mes de abril Suma-t colabora con Entre Libros, junto al laboratorio Endro y Catalysis.
Entre Libros es una Asociación de Granada que desde 2010 su objetivo principal es hacer presente la literatura y la filosofía allí donde pueda aportar bienestar, emoción, conocimiento, sosiego, confianza… Mediante la lectura en voz alta, la conversación y la escucha atenta, las voluntarias y los voluntarios de la Asociación Entrelibros promueven experiencias lectoras que aspiran a ser experiencias de vida.
Esa mediación lingüística e intelectual tiene un sentido ético, compromete a la Asociación Entrelibros con las personas, pero también con la sociedad.
La lectura tiene un poder para transformar el mundo, para hacerlo más comprensible y habitable. Hacer de la lectura su particular modo de intervención social.
La Asociación se ofrece a toda clase de personas, pero prestan especial atención a quienes están en situación de vulnerabilidad, privación, aislamiento, crisis o riesgo de exclusión. En esas circunstancias compartir relatos, reflexiones y emociones tiene un efecto terapéutico y alentador. El objetivo es que las buenas palabras alcancen a todos y reconoce la capacidad de todos para apreciar, pensar, sentir, discutir, dar sentido y apropiarse las palabras de otros.
A través de la lectura en voz alta se proporcionan espacios y tiempos para la conversación, para el encuentro significativo entre las palabras de los libros y las palabras de quienes las leen y las escuchan, no importa su edad o su condición.
Hacer de la lectura en voz alta una ocasión para el conocimiento, la felicidad y el entendimiento humanos.
Leer en la infancia
Numerosas evidencias científicas demuestran que los estímulos cognitivos y afectivos temprano, sobre todo los relacionados con el lenguaje, tienen una influencia determinante en el posterior desempeño escolar. Entre muchas actividades que ayudan en ese sentido, una de las más importantes es la lectura en voz alta de cuentos, poemas, rimas, retahílas…
Sus beneficios:
- Crea momentos de intimidad entre quienes leen y quienes escuchan, refuerza los vínculos afectivos y ayuda a explorar, expresar y compartir emociones, que es una actividad fundamental en la vida humana, más aún cuando se están construyendo los modos de sentir y de relacionarse con el mundo.
- Promueve la conversación, la escucha atenta y el intercambio de pensamientos, recuerdos, fantasías, experiencias, temores, deseos, sentimientos, dudas… Es decir, hace posible el encuentro sereno entre el mundo de los adultos y el mundo de la infancia.
- Estimula la actividad de las áreas cerebrales relacionadas con la comprensión narrativa y la creación de imágenes mentales, lo que repercute directamente en el aprendizaje de la lengua oral, la lectura y la escritura.
- Influye en el desarrollo cognitivo de la infancia al dar la oportunidad de escuchar, pensar, sentir, preguntar, responder, asociar…, es decir, de poner en juego las muchas capacidades de la mente.
Una tarea colectiva
Leer en voz alta debería ser una actividad habitual en los hogares. Dada su repercusión en la formación de los afectos y en el rendimiento académico, sería bueno que madres y padres se involucrasen en esa actividad con pasión y convicción.
La importancia de la lectura en voz alta
Leer un libro en voz alta a los niños es, por encima de todo, una demostración de afecto. Es un modo dichoso de relacionarse con ellos, de estar junto a ellos. Es un regalo en forma de tiempo, dedicación, escucha, conversación.
Las palabras de los libros hacen hablar a quienes los leen y los escuchan. Leer a los niños en voz alta implica estar dispuestos a escuchar y acoger sus fantasías, sus confidencias, sus recuerdos, sus pensamientos, sus emociones.
Al exponer a los bebés y a los niños pequeños a las palabras, los sonidos o las historias de los libros les estamos ayudando además a construir su lenguaje, a desarrollar su comprensión y a descubrir los mecanismos de la lectura y la escritura.
Escuchar historias leídas por otros prepara a los niños para leer luego por sí mismos. No se trata de enseñarles a leer precozmente, sino de interesarlos en el lenguaje y los libros, de estimular su curiosidad y su conocimiento. El éxito o el fracaso escolar tienen mucho que ver con las experiencias de los primeros años de vida.
Esas experiencias repercuten favorablemente en la salud de los niños. Contribuyen al crecimiento armónico de la infancia y a la prevención de futuras afecciones físicas y emocionales.